Vida Victoriosa Cristiana en el e-Mundo
(Para profesionales jóvenes)
¿Cómo pueden los cristianos vivir una vida espiritual victoriosa en Cristo en este mundo postmoderno? Vivimos en un mundo de ritmo rápido. Y aun más en este ¡e-mundo de cambios vertiginosos! Hace un par de años me dijeron que nuestro conocimiento se duplicaba cada 18 meses. ¿Cómo podemos mantener nuestras prioridades correctas, a fin de vivir en este mundo, victoriosos para Cristo?
A fin de ser victoriosos, debemos centrarnos en la principal prioridad de la vida cristiana, el cual es, ser un discípulo fiel de Jesús y llegar a ser un efectivo hacedor de discípulos para Él. El apóstol Pablo instruyó a su discípulo Timoteo así: "Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús. Y las cosas que me has oído decir en presencia de muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar a otros" (2 Tim. 2:1-2). Pablo a Timoteo, en el versículo 1 le está diciendo "sé un discípulo", y en el versículo 2 le dice "llega a ser un hacedor de discípulos".
Pablo continúa dando tres ilustraciones de la vida cristiana: como soldados que se preparan para una batalla espiritual (vv. 3-4), como atletas que compiten en una maratón espiritual (v. 5), y como agricultores que trabajan en una cosecha espiritual (v. 6). En todas ellas, "ganar" requiere disciplina y concentración para obtener la victoria (para ganar una guerra, una carrera y lograr una buena cosecha). Como Pablo, Timoteo (y todos nosotros) deberíamos ser capaces de hacer eco de: "pero mi vida no vale nada para mí a menos que la use para terminar la tarea que me asignó el Señor Jesús, la tarea de contarles a otros la Buena Noticia acerca de la maravillosa gracia de Dios” (Hechos 20:24). Al final de la vida, debemos ser capaces de decir como Pablo: "He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe" (2 Tim. 4:7), este es el "grito final de victoria" de ¡un discípulo fiel de Jesús y un hacedor de discípulos eficaz para Él!
Tristemente, muchos cristianos viven vidas derrotadas, en lugar de vivir como testigos victoriosos de Cristo (léase: hacedores de discípulos), siguen siendo cristianos inmaduros, como bebes que necesitan ser constantemente cuidados por los demás. Siguen siendo egoístas y enfocados en sí mismos, cuando en realidad ya deberían estar al servicio del Señor y alcanzando a otros. No son capaces de disfrutar la "vida abundante" que Jesús prometió: que deberíamos ser fructíferos, reproduciendo cristianos: "No sean egoístas; no traten de impresionar a nadie. Sean humildes, es decir, considerando a los demás como mejores que ustedes. No se ocupen sólo de sus propios intereses, sino también procuren interesarse en los demás" (Fil. 2:3-4).
Si usted piensa que todavía no es un "hacedor de discípulos", únase a un grupo pequeño o inicie uno nuevo. Usted puede pedirle a un cristiano maduro que le discipule en todo lo concerniente a un grupo pequeño. El discipulado es mejor hacerlo en grupos pequeños, para que pueda crecer espiritualmente mucho más rápido (la madurez espiritual incluye el desarrollo de la capacidad de amarnos unos a otros, enseñarnos unos a otros, someternos unos a otros, incluso confesarnos los pecados unos a otros, veamos Juan 13: 34-35; 1 Cor 14:26-33; Efe 5:15-21; Heb 10: 24-25; Santiago 5:16). El grupo no debería ser más de 12 a 15 miembros. Recuerde que, los discípulos se hacen en los grupos pequeños, nunca en las grandes reuniones. Lo que hay que aprender de su discipulador es: (a) la forma de experimentar a Dios y crecer espiritualmente, (b) cómo hacer evangelismo por amistad, y (c) cómo facilitar un grupo pequeño que sea eficaz haciendo discípulos.
Luego ore con su discipulador para que usted sea capaz de facilitar su propio "grupo de discipulado" en un máximo de 3 años de discipulado (y si espiritualmente usted es más maduro y tiene más dones espirituales, en sólo unos meses de discipulado debería hacerlo). Mientras se mantiene una estrecha relación con su discipulador, usted puede comenzar a discipular a sus propios discípulos a escuchar a Dios y luego darles la libertad de conducir sus propios "grupos de discipulado", también!
En realidad, así fue como nuestro Señor Jesús planeaba ganar al mundo – por medio de esta sencilla estrategia de hacer discípulos: Jesús llamó a 12 personas normales (¡gente del campo, a excepción del urbano Judas!) Después de discipularlos para hacer lo que Él hacía, los envió de dos en dos para que cada pareja haga 12 discípulos (Mateo 9:35 - 10:16). Después que lograron esto, Jesús ya estaba en la capacidad de enviar a “otros 72”, ya no a los originales (Lc. 10: 1, 17). Si los 12 y los "otros 72" eran enviados de dos en dos, esto forma 42 parejas que irían adelante para que cada pareja haga 12 nuevos discípulos, haciendo 504 nuevos discípulos, entre todos!
Leemos en 1 Corintios 15:6, que después de la resurrección, nuestro Señor se apareció a ¡más de 500 hermanos! Si estos 500 fueron emparejados, esto daría 250 parejas que harían 12 nuevos discípulos cada pareja, que serían capaces de discipular a ¡exactamente 3.000 nuevos conversos! Y eso es exactamente lo que sucedió en el aniversario de la Iglesia en Pentecostés: todos los convertidos fueron bautizados inmediatamente, ya que los apóstoles sabían que todos tendrían seguimiento y discipulado en por lo menos 250 iglesias en casas en Jerusalén ("casa por casa", Hechos 2 :41-47). No es extraño que el número ¡aumentara DIARIAMENTE!
Como misionero reclutador, también quiero añadir que si usted se convierte en un efectivo hacedor de discípulos, Dios puede llamarle para ir al extranjero y convertirle en un Hacedor de Tiendas (¡un misionero transcultural que practica su profesión en el extranjero!) Con solo un poco más de formación en cuestiones interculturales, usted puede ser ¡un hacedor de discípulos entre otros pueblos no cristianos! Después de todo, eso es lo que a cada uno de nosotros (no sólo a los ministros a tiempo completo) nuestro Señor Jesús nos manda que hagamos: "hacer discípulos de todas las naciones" (Mateo 28:19).
Así que vamos a seguir adelante, y solo ¡hágalo! Únase o forme un grupo pequeño para hacer discípulos. Capacítese sobre cómo hacer "evangelismo por amistad" y cómo "facilitar grupos pequeños eficaces en hacer discípulos". ¡Que Dios le moldee para ser un eficaz hacedor de discípulos en nuestra generación! ¡Vamos todos a ser cristianos victoriosos en el e-mundo!
____________________________________________________________________________
Traducido y adaptado por: Tentmakers Discipling Nations - TDN
Autor: David S. Lim, Ph.D.